Con alegría celebro la editorial de la edición de EL NUDILLAL del fin del año pasado en la cual se remembraba y se reconocía el trabajo ambientalista realizado en la localidad Alejandrina por las diversas organizaciones ambientales que han aportado su grano de arena para el desarrollo y concientización por el cuidado del medio ambiente y sus recursos naturales. Esta editorial me inspiró las siguientes líneas las cuales, con respeto hacia la editorialista, espero contribuyan a continuar con la reflexión que ella ya incitó.
Alejandría se encuentra frente a una gran oportunidad de cara a la posibilidad que le ofrecen sus recursos naturales y su creciente capacidad logística para el turismo y en este asunto el tema ambiental, tomado en serio, con responsabilidad y trabajo interinstitucional, puede dinamizar todo el asunto turístico con un mismo espíritu y así manejar varias de las externalidades negativas del turismo como son: las basuras y el manejo inapropiado de los recursos naturales por parte de los visitantes.
El trabajo tiene que ser de equipo, con iniciativas desde el sector público que propicien la traída de los visitantes, con propuestas desde el sector privado que fortalezca la infraestructura para el hospedaje y la alimentación de los visitantes y a su vez, con trabajo de las organizaciones ambientales que ofrezcan diversos servicios y productos encaminados a la valoración, protección y promoción de los recursos naturales y en especial de las particularidades de la localidad, aquellas singularidades que en ningún otro lugar se encuentran y que son a la postre los signos de la identidad alejandrina.
Realmente el trabajo en equipo no es tan difícil, lo que sí es difícil es el trabajo en solitario o con desconfianza y de cara esto menciono un asunto de vital importancia para que el trabajo ambiental prospere y es que esta labor requiere tanto de una visión clara del asunto ambiental enmarcado en un contexto global y local reconociendo la necesidad de trabajar por una serie de problemáticas que afecta a todos por igual, así como de una voluntad política fuerte, académica y respetuosa del trabajo que se realice, en otras palabras necesita no sólo de un trabajo de equipo sino también en equipo e interinstitucional.
Agregado a lo anterior, todos en Alejandría le apostamos al turismo como alternativa para el fortalecimiento de la economía y ésta apuesta no se puede hacer en falso o arriesgando todo el “plante” y menos cuando nuestro principal patrimonio es el ambiental y por esto que la misión sea de capitalizar lo que está en nuestro haber y multiplicarlo para beneficio y bienestar de todos.
Agradezco de manera especial que la señora editorialista haya referenciado a la Corporación Ambiental RECICREARTE, reconociendo que: “…mucho dio de qué hablar…a nivel nacional”. Y en especial porque esta corporación que muchos creen inactiva hoy día es la responsable de realizar la educación ambiental local enmarcada en los proyectos PRISER y de MIRS de la localidad. En otras palabras, hace 7 y 6 años era una carga fiscal que se apoyaba según una voluntad política celosa y hoy es un aliado académico en la tarea de la instrucción y la orientación de las comunidades de cara al compromiso de la promoción y conservación de nuestros recursos naturales.
Así las cosas, tenemos recursos, talento, compromiso, visión y todo un futuro por delante para seguir construyendo entre todos una Alejandría eco turística, progresista y en armonía con el medio ambiente; o en palabras de uno de los fundadores de la Corporación: “Una Perla Verde”.
Escrito por FRANK EDUARD PÉREZ SANDOVAL para el periódico EL NUDILLAL
